sábado, 5 de octubre de 2013

Bleach en la cabeza

Después de graduarme del colegio, me empecé a dejar crecer el cabello, pues siempre había querido dejármelo crecer y tenía pensado hacerlo apenas terminara la secundaria, porque ya no habría qué me lo impidiera. Ahora que había salido, por fin podría llevarlo largo, por lo menos durante algún tiempo y ver qué tal. Nada de rebeldía acumulada, no.

Dic. 2012, día de mi graduación y de empezar a dejarme crecer la melena.

Llevaba desde diciembre sin cortarme el cabello y habían pasado ya más de cuatro meses que no le pasaba una tijera. Mi cabeza empezando a tomar forma similar a la de una oveja, así que uno de los primeros días de mayo, luego de clases, pasé a un salón de belleza a preguntar por alguna recomendación para mi cabello, aceptando escuchar cualquier cosa que no tuviera mucho que ver con cortarme bastante cabello.

Dos días después me encontraba en el salón de belleza teniendo en la cabeza un resultado muy distinto a lo que me habían dicho que me harían. Por fortuna la señora que me atendió sólo me había cortado cabello de arriba y de a los lados; aún no había pasado a cortar la parte de atrás. Le dije que se detuviera un momento mientras me veía bien en el espejo. No me gusta hacer lo que hice a continuación pero, tuve que fingir una sonrisa mientras la veía a través del espejo.

"Era justo lo que quería. Ya, puede dejarlo así. ¡Perfecto!", le dije y antes de ponerme de pie y quitarme la capa, pregunté cuánto dinero sería por el corte. Al instante me dispuse pagar.

Aparentemente la señora notó mi cara de insatisfacción disfrazada de gratitud y emoción, y se atrevió a decirme que regresara si al final no me simpatizaba el corte, que por $3 más podría "mejorarlo". Y pensar que en casa mi papá con su máquina corta pelo me habría hecho algo mejor, lo mismo o algo peor, pero de gratis.

Más o menos un mes después del chasco en mi cabello... "recuperándose"...

El tiempo avanza y no se detiene ni un segundo. Mi cabello volvió a crecer y quedó bastante parejo(?), para como lo tenía. Frecuentemente pienso que hay más puntos negativos de tener cabello largo, que buenos, por ejemplo los peores: da mucho calor y me dificulta el peinarme, lo que me ha llevado a considerar la posibilidad de cortarmelo, pero siempre termino dándome ánimos para dejarlo crecer un poco más y continúo cargando mi alboroto por doquiera que voy.

He pensado en que antes de cortarmelo, debería hacerme algo para "aprovechar" que llegué al largo que he logrado. Estoy considerando la idea de quemarmelo plancharmelo, teñirlo, hacerme trencitas, rastas o no hacerle nada y donarlo a alguna institución, en caso de que me lo acepten. Pero de repente se me ocurrió hacerme un par de mechones de color amarillo (decoloraciones) en la parte de atrás. Entones me fui a la farmacia a comprar los únicos dos ingredientes que necesitaría: bleach y peróxido, pues en casa tenía los utensilios (improvisados) para crear la mezcla.


Invertí unos $3 en ambos productos
Me quedó suficiente para futuras aplicaciones

Apariencia de la mezcla resultante

Tuve que dejar la mezcla sobre el cabello durante
unos 25 min, pues estaba costando que decolorara

Los mechones son pocos y prácticamente sólo se ven bajo la luz del sol. Pero ahora me gustaría probar con otro color y en más áreas. A ver qué termino haciéndole a mi enredo...

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